Lucha a muerte

Ricardo Morales Sánchez - Serpientes y Escaleras

 

Aunque aún hacen falta dos años para la elección constitucional del 2010, es un hecho que los dos partidos políticos más importantes en este estado, PRI y PAN, vivirán una lucha a muerte antes de que puedan tener a su representante para participar en la apuesta por Casa Puebla.

Las dos principales fuerzas políticas tendrán como reto en los dos próximos años conservar la unidad de sus organizaciones, lo cual se antoja difícil ante la polarización que ya se presenta en ambos bandos.

Por el lado del PRI, el nuevo presidente de este instituto político, Alejandro Armenta Mier, ya probó el sabor de la derrota y tiene enfrente un proceso electoral federal que se antoja complicado para su partido, pese a que en este momento las encuestas nacionales le dan la ventaja al tricolor frente al albiazul.

Los resultados que arroje la contienda para renovar a la Cámara de Diputados, será un referente y determinará si Armenta Mier llega o no con la fuerza suficiente para mantenerse como el juez de la contienda por la grande.

Una vez superada la barrera de la elección federal del próximo año, Armenta deberá demostrar en verdad de qué está hecho y preservar en la mayor medida posible la unidad priista, lo cual francamente se ve difícil.

Es muy claro que hay un aspirante (Enrique Doger) que no aceptará por ningún motivo cualquier nominación, que no sea la suya para abanderar al PRI rumbo a Casa Puebla.

También es obvio que Enrique Doger no tiene la más mínima posibilidad de convertirse en el abanderado del PRI a la gubernatura; luego entonces, será el principal adversario del partido que lo llevó al poder en el 2004.

Jugando al periodismo ficción al cual muchos de los fans dogeristas son aficionados, es claro que el día en que el PRI presente a su candidato a la gubernatura ese mismo día en la ciudad de México el expresidente municipal de Puebla, en conferencia de prensa, anunciará su salida del PRI y acto seguido se lanzará en contra del candidato, al cual señalará como producto de una imposición. Desde luego se volverá hacer la víctima como acostumbra y denunciará que ha sido víctima de una campaña de Estado para evitar su postulación y limitar sus legítimas aspiraciones políticas.

Días más tarde Doger anunciará su adhesión como “ciudadano” a la campaña del candidato de Acción Nacional, sea quien sea el elegido en las filas panistas.

 

En el otro frente

En Acción Nacional aunque las cosas se ven complicadas no son tan difíciles como en el PRI.

La ruptura entre Rafael Moreno Valle Rosas y Ana Teresa Aranda, aunque es real, se antoja más que desquilibrada. La balanza está a favor del senador de la República quien tiene ya un verdadero club de fans dentro de este partido, el cual es encabezado por la mayoría de los diputados federales del PAN, incluido el “mismísimo” pastor Francisco Fraile García, quien de “pastor” ha pasado a ser oveja.

Ana Teresa Aranda buscará en los próximos años iniciar una “guerra de guerrillas” en contra de Moreno Valle, sabedora de que su fuerza no es la suficiente para enfrentar de frente a su “bestia negra”. Los que buscará será desgastar al expriista y tratar de que llegue lo menos fuerte posible a la contienda del 2010, pero a diferencia de Enrique Doger, la “doña”, por ningún motivo cambiará de bando, lo más probable es que haga lo mismo que hizo en la pasada campaña local, no aparecer nunca cerca del candidato, pero eso no le afectará en nada al exsecretario de Finanzas en la era de Melquiades Morales Flores.

La fractura panista no será tan fuerte como sí podría en su caso suceder en el PRI y ahí una vez más Moreno Valle y sus operadores estarán pendientes para “cachar” a todos los inconformes con el marinismo, todos lo que tienen cuentas pendientes con el actual grupo en el poder, todos aquéllos que sienten que han sido menospreciados, o en algunos casos hasta ofendidos.

Aquí también será importante poder medir la capacidad de ambos dirigentes partidistas, tanto Alejandro Armenta como Rafael Micalco, para poner en marcha una estrategia encaminada a mitigar en su medida los efectos de estos choques que se presentarán en ambos partidos.

Después de todo una de las múltiples definiciones de política, es una que dice que política es el arte de la negociación.

 

Ricardo Morales Sánchez

laserpientesyescaleras@hotmail.com