miércoles, abril 09, 2008

El Senador Ángel sin el ángel del Yunque

Los Conjurados
Erika Rivero Almazán

Los motivos de Díaz Caneja para romper con el Yunque

— Aquí tienes mi mano amiga, siempre extendida, Ángel. ¿Cuándo platicamos?
— Lo sé Paco, pero no, gracias. Nunca voy a volverme a reunir contigo, mano, la verdad no me interesa. No cuenten conmigo. No tenemos nada de qué platicar. Tomé una decisión y no voy a volver con ustedes. Me llegó tu carta y ya viste que no te la respondí. No insistas.

Y la mano de Francisco Fraile se quedó extendida.
El senador Ángel Alonso Díaz Caneja jamás se la recibió.
Si a duras penas le devolvió la mirada.
Este fue el encuentro tan fugaz como ríspido entre ambos panistas en la comida de cumpleaños de el tigre, Humberto Aguilar Coronado, el viernes pasado.
El divorcio es real, duradero.
Ángel Alonso, el cachorro preferido del pastor Fraile, se apartó del rebaño.
Y puede ser que sea definitivo.
¿Por qué una de las promesas más valoradas en el Yunque poblano, al que se le auguraba una fructífera carrera en Acción Nacional, decidió seguir su camino de manera independiente y darle la espalda a la Organización?
Hoy la pregunta es válida cuando el nombre de Díaz Caneja se agrega a la lista de los cuatro aspirantes del PAN por la candidatura a la gubernatura y cuando es el único (junto con Fraile) que conoce cada rincón del panismo en todo el estado.
Toda la militancia lo conoce y le reconoce.
Ése es el factor que lo distingue del resto de los aspirantes.
Es la cualidad que lo distingue de Ana Teresa Aranda, Humberto Aguilar Coronado y Rafael Moreno Valle: el conocimiento de la estructura hasta en el municipio más recóndito, la experiencia en el manejo del partido, sus nexos con quienes toman las decisiones en el Pan (o sea, el Yunque), su fuerte instrucción en la ultraderecha, su trayectoria partidista y los importantes cargos en distingas áreas de gobierno en los que ha sido favorecido, pues se trata de puestos de elección popular plurinominal.
Díaz Canjea respondió a la confianza de la Organización, y a su vez, fue premiado.
Nunca fueron rumores la proyección como candidato a la presidencia municipal de Puebla, primero, y a la gubernatura después.
Su nombre estaba colocado antes del actual coordinador de la bancada panista en el Congreso del Estado, Eduardo Rivera, quien de alguna manera, viene a suplir el espacio que dejó vacante Díaz Caneja.
Todavía, en el 2004, Ángel Alonso era identificado como ‘orgánico’ a nivel nacional, y como uno de los principales activos del PAN y Francisco Fraile.
En el libro “El Ejército de Dios”, de Álvaro Delgado, el premio nacional de periodismo no duda en identificar a Díaz Caneja como gente de Fraile: “con la llegada de Fraile al PAN, muchos personajes nuevos tuvieron cabida, quienes hoy tienen una gran influencia en el partido... forman parte del Yunque Ángel Alonso Díaz Caneja, diputado federal y ex presidente estatal, así como... “ (pag 175).
Pero sus nexos con el ultraderecha se rompieron a raíz de que Ángel decidió apostarse por la precandidatura de Felipe Calderón, en lugar de sumarse a la apuesta del PAN poblano a favor del supuesto favorito: Santiago Creel.
Fue a partir de una mixotiza de casi 5 mil panistas, organizada supuestamente para celebrar su cumpleaños, en donde Díaz Caneja hizo público su nombramiento oficial como coordinador de la precampaña en Puebla de Calderón. Y quién mejor para dar tal anuncio que el propio Felipe, quien fungió como invitado especial la fiesta.
Fue cuando Ángel pidió a su pastor, por primera vez, su ayuda y apoyo.
Pero Fraile, fiel a los principios de la Organización, no desobedeció la orden, o sea, se desentendió del asunto.
Ángel se quedó solo.
Sin su pastor.
El Yunque y sus amigos le dieron la espalda.
La rueda de la fortuna entregó un final inesperado: fue Calderón quien le ganó la partida a Creel, contra todos los pronósticos.
Desde entonces, Díaz Caneja no perdona a su pastor.
La situación empeoró cuando ya convertido en candidato a la presidencia de la República, Felipe Calderón pidió a Ángel una demostración de lealtad: cederle su lugar como candidato a la senaduría en primer lugar de la fórmula a Rafael Moreno Valle, esto debido a las negociaciones establecidas con la maestra Elba Esther Gordillo.
Tal demostración de lealtad, tuvo un altísimo precio: el día que Díaz Caneja aceptó ceder la senaduría a Moreno Valle, ése día renunció al camino directo para llegar a la candidatura a la gubernatura.
En ese momento, la Organización también lo dejó solo.
Estos dos momentos fueron la clave para que Ángel Alonso se convirtiera en un operador panista independiente, apoyado por miembros de su misma camada, al lado de Fraile: Roberto Grajales y Angélica Ramírez, hija de Antonio Ramírez Castellanos, uno de los más antiguos caciques del Yunque poblano.
Y esa independencia le está permitiendo apoyar a candidatos a puestos electorales o internos del partido, a impulsar consejeros estatales, presidentes de comités, etc.
Sin embargo, meticuloso como es, en esta ocasión Díaz Caneja conoce su fuerza y optó por administrarla: en la asamblea estatal y municipal del próximo 20 de abril optó por fijar su estrategia en la obtención del mayor número de consejeros estatales, ya que serán ellos quien el día de mañana elijan al próximo presidente del partido, mismo que servirá de trampolín al candidato a la gubernatura.
Por tanto, Díaz Caneja no gastará su pólvora en el infiernito de la elección a la presidencia del Comité Municipal: el próximo líder estatal sólo permanecerá año y medio, a expensas de un comité que no se renovará.
Esta acción provocó un distanciamiento (mas no una pelea) con Genaro Ramírez, quien hasta hace un par de semanas todavía era considerado ya parte del grupo de Ángel.
Y es que Genaro Ramírez decidió aliarse con el exalcalde Luis Paredes, Héctor Montiel, Jesús Encinas, Eduardo Covián y con Violeta Lagunes para apoyar al candidato de la disidencia: Miguel Ángel Dessavre, quien compite con el favorito (etiquetado de yunque) Bernardo Arrubarrena.
La desobediencia de Ángel (faltando así a la pena capital del Yunque ‘el que obedece no se equivoca’), le está costando cara.
La estrategia de Díaz Caneja para llegar a la gubernatura, planeada desde hace años, incluía el apoyo de la Organización. Sin embargo, cuando la realidad actual es diferente, el conocimiento sobre el control de la estructura estatal del panismo ya no es una herramienta tan indispensable: recordemos que el próximo 27 de abril, durante la asamblea nacional, el PAN modificará sus estatutos y con ello romperá los candados que permitirán el registro libre así como el voto de la militancia adherente, lo que significa ampliar el padrón de 13 mil 271 (miembros activos registrados en el padrón del PAN hasta diciembre del 2007) a , 50 mil 200 panista adherentes, lo cual dispara la cifra de votantes e imposibilita la antes fácil manipulación de dicho padrón.
Por otra parte, aunque Díaz Caneja goza de una estrecha relación con Calderón y el presidente nacional del PAN, Germán Martínez, existe una persona que lo supera en cuanto a simpatía: Ana Teresa Aranda, quien aún siendo rechazada en la Cámara de Senadores para convertirse en embajadora de Chile (propuesta del propio Felipe Calderón), el presidente no tuvo empacho en rescatarla y revalorarla como subsecretaria de Gobernación.
Por otra parte, ya es imposible disimular la preferencia de Rafael Micalco, presidente del estatal, hacia Rafael Moreno Valle, situación que fue revelada públicamente por Ana Tere, quien califica a las dirigencias de su partido como ‘descaradas’ por operar a favor de Moreno Valle en su búsqueda por la gubernatura:
“Rafael no sólo tiene abierta la puerta del Comité Municipal, sino que tiene al comité estatal a su servicio. Creo que el cambio de estatutos cambiara las cosas para el PAN y con el cambio de estatutos ya no podrá haber comités que estén al servicio de nadie. (El sol de Puebla. 30 de Marzo del 2008).
Con esta declaración, Ana Tere deja descubierto quién realmente puede hacerle sombra en sus aspiraciones: el expriísta Rafael Moreno Valle.
Para Díaz Caneja, la consolidación de la candidatura se dificulta cada día más, mientras adversarios como Ana Tere y Moreno Valle se fortalecen. La primera, son su privilegiada posición en el gabinete calderonista, el segundo por sus nexos con Elba Esther Gordillo y su estrategia operativa que abarca al PRI, PRD, Convergencia y los partidos políticos que se dejen: su cartera es generosa.
Ángel Alonso, con la sanción a cuestas de la Organización, deberá redefinir su estrategia.
O bien, modificar sus pretensiones.
Tal vez, ahora sus ojos observen con atención la presidencia municipal de Puebla.

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