Un mail.
“A mediados del mes de marzo la subsecretaria de Asuntos Religiosos, Migración y Población de la Secretaría de Gobernación Federal, Ana Teresa Aranda de Orea, refirió que se veía como candidata a gobernador en 2010, ‘paso a pasito, si los panistas quieren’. Pero para conseguir ese objetivo ‘sus correligionarios deben dejar las mezquindades y el egoísmo interno para luchar unidos y ganar la mayoría de las curules en juego el próximo año, pues sólo así podrá garantizarse el éxito del proyecto del presidente Felipe Calderón Hinojosa’ (sic). Ciertamente ‘La Doña’ está en su derecho de competir por la gubernatura de Puebla. Sin embargo, resulta incongruente que pida al panismo dejarnos de mezquindades y egoísmos, porque precisamente estas actitudes provienen de quien se supone ha sido ultrajada y crucificada políticamente por El Yunque y qué bueno que toca ese punto porque el buen juez por su casa empieza.
Cuando Ana Teresa Aranda buscó ser la abanderada del PAN a la Presidencia Municipal, les ‘doró la píldora’ a un sinfín de panistas (la mayoría disidentes) para sumarlos a su propuesta. Muchos movidos por el estómago y la necesidad de una estabilidad personal y profesional, así como llevar el sustento diario al hogar acabaron aceptando gustosamente una chambita en la Sedesol. Para tener el control total de la delegación era imprescindible el reemplazo del delegado Ramón Mantilla por alguien de más confianza de ‘La Doña’ y, en esta circunstancia, arribó como delegada Anahí Romero Alonso, desde entonces la Sedesol está vuelta patas pa’rriba y al servicio de los más sucios intereses del anateresismo. Ineptitud, clientelismo y terrorismo laboral son los comunes denominadores de una dependencia ‘abundante’ en recursos”. (Continuará)
Ricardo Morales / intolerancia
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